Introducción al Ajustador del Pensamiento
En El Libro de Urantia, se exploran muchos conceptos relacionados con la espiritualidad y la relación entre Dios y los seres humanos.
Uno de los conceptos centrales es el Ajustador del Pensamiento, una chispa divina que habita en la mente humana.
Este Ajustador, según las enseñanzas del libro, proviene directamente de Dios, el Padre Universal, y tiene la misión de guiarnos hacia una vida de crecimiento espiritual y, eventualmente, hacia la perfección divina.
El Ajustador reside en la mente humana, pero su trabajo no es material ni mecánico, sino profundamente espiritual.
Origen y naturaleza del Ajustador del Pensamiento
Los Ajustadores del Pensamiento son fragmentos de la divinidad, específicamente del Padre Universal.
Son una expresión directa de Dios, no creados por otras entidades intermedias, sino proyectados directamente desde la presencia del Padre Universal en el Paraíso.
Este hecho subraya la pureza de su naturaleza divina y su propósito supremo: guiar a las criaturas mortales hacia la perfección espiritual.
¿Es el Ajustador del Pensamiento Dios en sí mismo?
Aunque el Ajustador del Pensamiento proviene directamente de Dios, El Libro de Urantia aclara que no es Dios en su totalidad, pero sí una parte de Él.
El Ajustador es un fragmento puro de la esencia del Padre Universal, una chispa divina que habita en el ser humano.
Sin embargo, a diferencia de Dios mismo, el Ajustador no posee personalidad propia. Su misión es guiarnos hacia Él y, en última instancia, ayudarnos a alcanzar la perfección espiritual.
A medida que nos abrimos a su influencia, el Ajustador trabaja para que nuestra alma pueda fusionarse con este fragmento divino, creando así una unión eterna con Dios.
Nota: El Ajustador del Pensamiento y la unidad de Dios:
Si entendemos a Dios como el Padre Universal, que en su totalidad es el origen de todo, podríamos preguntarnos cómo es posible que una parte de Él habite en nosotros si, según filosofías como la del Kybalion, «El Todo es indivisible«.
El Libro de Urantia describe al Ajustador del Pensamiento no como una «parte» separada de Dios, sino como una expresión directa y presente de su esencia dentro de nosotros.
No es un fragmento en el sentido de división, sino más bien una manifestación personal del Infinito que guía y moldea nuestra conciencia hacia la unión espiritual con el Todo.
En este sentido, el Ajustador no posee una personalidad separada ni actúa como una entidad independiente; más bien, es una presencia divina que trabaja dentro de nosotros para ayudarnos a reconocer y conectar con la naturaleza divina que ya existe en nosotros.
¿Cómo llega un Ajustador del Pensamiento a los humanos?
El Ajustador del Pensamiento no aparece en nuestras vidas al nacer, sino que llega a nuestra mente en un momento específico del desarrollo.
Cuando un niño desarrolla por primera vez la capacidad de tomar decisiones morales, generalmente entre los 5 y 6 años, el Ajustador es enviado para habitar su mente.
Este momento, conocido como la primera elección moral consciente, es clave porque marca el punto en que el ser humano comienza a ejercer su libre albedrío en asuntos éticos, y con ello se abre la puerta para la intervención divina.
Actúa en niveles que superan lo físico, influenciando el pensamiento, inspirando hacia decisiones elevadas y ayudando a cada persona a desarrollar una consciencia cada vez más alineada con la voluntad de Dios.
¿Por qué se les llama «Ajustadores»?
El término «Ajustador» se refiere a su función de «ajustar» los pensamientos humanos hacia la voluntad divina.
Es decir, su trabajo es, sutilmente, guiar nuestra mente hacia la verdad, la bondad y la belleza, que son expresiones de la voluntad divina.
No imponen decisiones, sino que proponen el camino más elevado, siempre respetando la libertad de elección del mortal.
Relación con el Paraíso y el Padre Universal
Cada Ajustador es una manifestación pura de la esencia del Padre Universal en el Paraíso, y aunque el Ajustador es enviado a una vida mortal, su origen sigue estando conectado con el centro del universo.
Este fragmento de Dios no está separado de la totalidad divina, sino que es un aspecto particular de la presencia universal del Padre, con la misión de guiar a cada individuo hacia la perfección y la eventual fusión eterna.
Es importante recalcar que, aunque el Ajustador es prepersonal (es decir, no posee una personalidad propia hasta que se fusiona con el mortal), su misión está profundamente ligada a nuestro crecimiento espiritual.
No tiene personalidad por sí mismo, pero trabaja para que nuestra alma, combinada con nuestra mente y decisiones, alcance niveles de perfección cada vez mayores, con la posibilidad de que eventualmente la fusión con el Ajustador nos convierta en seres inmortales.
Tipos de Ajustadores del Pensamiento
No todos los Ajustadores del Pensamiento son iguales. Aunque todos provienen directamente del Padre Universal, existen diferentes tipos de Ajustadores según su nivel de experiencia previa y su desarrollo en el cumplimiento de su misión divina.
El Libro de Urantia clasifica los Ajustadores en tres grandes categorías:
1. Ajustadores Vírgenes
Los Ajustadores vírgenes son aquellos que nunca han habitado en ningún ser humano ni en ninguna otra criatura mortal antes.
Son enviados por primera vez para asistir a un mortal en su carrera espiritual.
Su «inexperiencia» no disminuye su capacidad ni su naturaleza divina, pero sí los coloca en un estado de aprendizaje activo mientras guían a su primer ser humano.
Estos Ajustadores están profundamente comprometidos con el crecimiento de la persona que habitan y su misión es explorar la mente humana, influir en los pensamientos y asistir en las decisiones morales sin haberlo hecho nunca antes.
2. Ajustadores Avanzados
Los Ajustadores avanzados son fragmentos del Padre Universal que ya han habitado en otros seres mortales previamente, pero que por alguna razón no han logrado la fusión eterna con esas almas anteriores.
Aunque el mortal anterior pudo haber rechazado la carrera espiritual o no haber alcanzado la madurez necesaria, el Ajustador ha acumulado experiencia y está más preparado para guiar a un nuevo mortal.
Su experiencia previa les permite entender mejor los desafíos y la naturaleza humana, y sus habilidades para inspirar y guiar a la mente de los mortales son más afinadas.
3. Ajustadores Supremos
Los Ajustadores supremos son los más experimentados y altamente desarrollados.
Estos fragmentos divinos han habitado en varios mortales anteriormente, han ganado una experiencia considerable y han demostrado una capacidad superior para guiar al ser humano hacia su potencial divino.
A menudo, estos Ajustadores han servido en varias vidas humanas, y aunque no lograron la fusión eterna con los mortales anteriores, están extraordinariamente capacitados para asistir a una nueva alma en su viaje espiritual.
Su objetivo sigue siendo el mismo: guiar al mortal hacia la fusión y la perfección espiritual.
Dado su amplio conocimiento y experiencia, estos Ajustadores suelen ser asignados a individuos con grandes potencialidades espirituales o misiones importantes dentro del plan cósmico.
¿Cómo se elige el tipo de Ajustador del Pensamiento para cada mortal?
La asignación de un Ajustador a un ser humano no es aleatoria. El tipo de Ajustador depende de la naturaleza espiritual y el potencial del mortal.
Por ejemplo:
Ajustadores vírgenes suelen ser asignados a mortales cuya carrera espiritual está en una etapa muy inicial, aunque no hay reglas estrictas al respecto.
Ajustadores avanzados y supremos tienden a ser enviados a personas con un mayor potencial espiritual o una misión más clara en el universo, pues su experiencia les permite guiar a estos individuos con mayor precisión y efectividad.
La evolución del Ajustador del Pensamiento
Una vez un Ajustador comienza su labor con un mortal, su nivel inicial no define su progreso.
Al igual que los seres humanos, los Ajustadores también crecen y evolucionan en su capacidad para guiar.
Cuanto más se alineen con el libre albedrío y las decisiones morales de la persona, más avanzan en su habilidad para ayudar a ese ser en su camino espiritual.
Relación del Ajustador con el libre albedrío
El libre albedrío es uno de los pilares fundamentales en la relación entre el Ajustador del Pensamiento y los seres humanos. A pesar de la naturaleza divina y poderosa del Ajustador, su influencia nunca viola ni reemplaza la capacidad de decisión del ser humano. El Ajustador es un guía interior que sugiere, inspira y apunta hacia decisiones más elevadas, pero jamás impone su voluntad. Esto es lo que distingue a la relación entre los mortales y el Ajustador: una cooperación libre, consciente y voluntaria.
1. El Ajustador propone, pero no obliga
El Ajustador del Pensamiento actúa como una brújula espiritual.
Está constantemente proporcionando impulsos hacia la verdad, la bondad y la belleza, pero nunca fuerza al mortal a seguir estos caminos.
La influencia del Ajustador es silenciosa y, a menudo, imperceptible para la mente consciente, ya que trabaja en los niveles más profundos de nuestra psique.
Sin embargo, el Ajustador respeta absolutamente la autonomía de cada individuo y espera pacientemente la elección voluntaria del bien.
2. El libre albedrío: clave en la evolución espiritual
En la filosofía urantiana, el libre albedrío es esencial para el desarrollo espiritual.
La evolución hacia la perfección y la fusión con el Ajustador requiere que el ser humano tome decisiones conscientes y voluntarias.
En cada momento, se nos presenta la oportunidad de elegir caminos que nos acerquen a la voluntad de Dios o que nos alejen de ella.
Cuanto más optamos por actuar en consonancia con los impulsos divinos que sugiere el Ajustador, más fácil resulta escuchar su guía.
Ejemplo práctico: cuando nos enfrentamos a una decisión moral—como si debemos decir la verdad en una situación difícil o ceder a una tentación egoísta—el Ajustador está allí, siempre sugiriendo la opción que eleva nuestra alma.
No obstante, la elección final depende exclusivamente de nosotros.
3. El crecimiento personal y la interacción con el Ajustador del Pensamiento
El Ajustador se adapta a nuestro nivel de madurez espiritual.
A medida que nuestras elecciones se alinean más con los valores espirituales, el vínculo con el Ajustador se fortalece.
Cuanto más elegimos el bien, más sensible se vuelve nuestra mente a las sutiles indicaciones del Ajustador.
Este proceso de colaboración constante entre el Ajustador y el libre albedrío es lo que forma y desarrolla el alma morontial.
Sin embargo, si una persona rechaza persistentemente las sugerencias del Ajustador y elige el egoísmo o la negligencia espiritual, el Ajustador no abandona su labor, pero la mente humana puede volverse menos receptiva a su influencia.
La sincronización entre el mortal y el Ajustador depende del uso consciente y constante del libre albedrío en favor de los valores más elevados.
4. Libertad de rechazar o abrazar el propósito divino
Los Ajustadores están comprometidos con la misión de guiar al ser humano hacia su potencial divino, pero no pueden obligar a nadie a seguir este camino.
El libre albedrío da a cada persona la posibilidad de rechazar las sugerencias divinas.
En el universo urantiano, los seres humanos pueden, si lo desean, vivir sus vidas sin jamás aceptar conscientemente el impulso del Ajustador.
Sin embargo, aquellos que eligen seguir la voluntad del Padre y el ajuste del Pensamiento divino se embarcan en un viaje espiritual que culmina en la fusión eterna con el Ajustador.
Conclusión sobre el libre albedrío y el Ajustador
La relación entre el Ajustador y el libre albedrío es una colaboración espiritual.
El Ajustador está siempre dispuesto a guiar al ser humano hacia el crecimiento y la perfección, pero su influencia depende completamente de la elección voluntaria de cada persona.
De esta manera, el libre albedrío no es solo una característica humana, sino el fundamento mismo del proceso espiritual, que permite que el mortal se desarrolle y avance por su propia voluntad en el camino hacia la fusión con su fragmento divino.
Comunicación con el Ajustador del Pensamiento
Una de las preguntas más profundas para aquellos que descubren la existencia del Ajustador del Pensamiento es cómo podemos comunicarnos con este fragmento divino que habita en nuestra mente.
El Ajustador del Pensamiento siempre está presente y activo, pero su comunicación con nosotros no es directa ni verbal.
Al ser un fragmento del Padre Universal, el Ajustador opera en un nivel espiritual tan elevado que nuestras mentes humanas suelen no captar sus mensajes de manera explícita.
Sin embargo, esto no significa que no sea posible desarrollar una sensibilidad espiritual que facilite esta comunicación.
1. La naturaleza de la comunicación del Ajustador del Pensamiento
El Ajustador no utiliza el lenguaje humano ni las formas de comunicación a las que estamos acostumbrados.
En lugar de palabras, el Ajustador del Pensamiento actúa a través de impulsos espirituales, intuiciones profundas y una especie de sabiduría interna que nos empuja hacia elecciones más elevadas y altruistas.
Algunos ejemplos que puedes haber sentido, o sentirás, más de una vez:
Impulsos y presentimientos
A menudo, las personas describen la influencia del Ajustador como una sensación o una intuición que les sugiere el camino correcto, especialmente en decisiones morales importantes.
Esta sensación no suele tener un origen claro, pero se manifiesta como un impulso hacia la verdad, la bondad o la belleza.
Inspiración creativa y altruista
En algunos casos, la influencia del Ajustador puede ser experimentada como momentos de inspiración, donde la persona siente un fuerte deseo de crear, ayudar o mejorar el mundo a su alrededor.
Estos momentos, aunque sutiles, son manifestaciones del Ajustador alineando nuestros pensamientos con la voluntad divina.
2. Cómo sintonizarse con el Ajustador
Aunque el Ajustador está siempre activo, no todos los humanos somos igualmente sensibles a su presencia.
La sintonización espiritual con el Ajustador se logra mediante la práctica consciente de la reflexión, la oración y la meditación.
Estos son momentos en los que la mente se calma y se vuelve más receptiva a los sutiles impulsos que provienen del Ajustador.
Meditación y quietud
Entrar en un estado de calma interna nos ayuda a percibir mejor los impulsos del Ajustador.
La mente sobrecargada por los problemas del día a día interfiere en la capacidad de captar los mensajes sutiles del Ajustador, de manera que eres incapaz de «oir» nada.
Tomarse el tiempo para silenciar el ruido mental y concentrarse en la comunión interior facilita la percepción de la guía divina.
Reflexión moral
El Ajustador trabaja especialmente en el campo de las decisiones morales.
Cuando reflexionamos sobre nuestras acciones, sobre lo que es correcto o incorrecto, estamos más propensos a percibir su influencia.
Cuanto más consciente sea el ser humano de sus decisiones éticas, mayor será la sintonía con el Ajustador.
3. Barreras para la comunicación
A pesar de su dedicación y constante trabajo, la comunicación con el Ajustador puede verse obstaculizada por varias razones:
Ruido mental
La confusión interna, las distracciones externas y una mente sobrecargada de preocupaciones mundanas bloquean nuestra capacidad de captar los impulsos del Ajustador.
Negación o indiferencia espiritual
Las personas que eligen ignorar las preguntas más profundas sobre su propósito o que evitan reflexionar sobre el bien y el mal, se vuelven menos receptivas a los impulsos del Ajustador.
El materialismo extremo, el egoísmo y la falta de introspección también son obstáculos comunes.
Falta de fe o confianza
Aquellos que dudan de la existencia o del papel del Ajustador dificultan, sin saberlo, su propia capacidad de percibir sus sugerencias.
La confianza en la realidad espiritual es clave para establecer una mayor sensibilidad a la guía del Ajustador.
4. Experiencias especiales de comunicación
En raros casos, individuos altamente desarrollados espiritualmente llegan a experimentar un tipo de comunión más clara con su Ajustador.
Esto puede incluir una mayor intuición, un sentido agudo de dirección espiritual o incluso, en los casos más extraordinarios, momentos de auténtica claridad espiritual donde el mortal siente que percibe directamente los deseos y sugerencias del Ajustador.
Ejemplos históricos
Algunos personajes históricos o líderes espirituales han logrado tal nivel de sintonía que parecían actuar con una certeza absoluta respecto a su misión o propósito.
Estos casos son extremadamente raros, pero muestran que la comunicación más consciente con el Ajustador es posible, aunque normalmente después de un largo periodo de madurez y desarrollo espiritual.
Conclusión sobre la comunicación con el Ajustador
Aunque la comunicación con el Ajustador no es directa ni verbal, es completamente real.
El Ajustador actúa a través de impulsos morales, inspiración y profundas intuiciones que, aunque sutiles, tienen un impacto transformador en la vida de una persona.
La clave para desarrollar esta sintonía espiritual es cultivar la calma interna, el reflejo moral consciente y una fe sincera en la realidad divina.
A medida que el ser humano crece espiritualmente, la capacidad de percibir la influencia del Ajustador se hace más clara y poderosa.
El Ajustador del Pensamiento y el alma en crecimiento
El Ajustador del Pensamiento juega un papel fundamental en el desarrollo del alma humana.
Al ser un fragmento de la esencia divina, su propósito es guiar a cada individuo en su camino hacia la madurez espiritual y la realización del potencial divino.
Este proceso de crecimiento espiritual se puede entender en varios niveles:
1. La función del Ajustador en el desarrollo del alma
Guía y dirección
Desde el momento en que un ser humano comienza su vida, el Ajustador del Pensamiento ofrece impulsos intuitivos y sugerencias morales.
A través de estos, el Ajustador ayuda al mortal a distinguir entre el bien y el mal, guiando sus decisiones hacia el desarrollo del carácter y la virtud.
Influencia sobre las decisiones
A medida que el mortal experimenta la vida y enfrenta desafíos, el Ajustador influye en sus decisiones, promoviendo un crecimiento que refleja valores espirituales.
La capacidad de discernimiento y el libre albedrío son esenciales en esta relación, ya que el individuo debe elegir alinearse con los impulsos del Ajustador o seguir sus propios deseos egoístas.
2. Fusión y desarrollo del alma
Preparación para la fusión
El crecimiento espiritual se intensifica a medida que el mortal se vuelve más receptivo a la guía del Ajustador.
Este proceso culmina en la fusión entre el Ajustador y el alma del mortal, un acontecimiento que simboliza la completa alineación de la voluntad humana con la voluntad divina.
Esta fusión no solo significa la realización del potencial del alma, sino que también marca un nuevo capítulo en su existencia espiritual.
Elevación de la conciencia
Durante el proceso de fusión, la conciencia del ser humano se eleva a un nivel superior.
La experiencia acumulada del mortal, combinada con la esencia divina del Ajustador, da lugar a una nueva identidad que refleja una mayor comprensión de la verdad, la belleza y la bondad.
3. Desarrollo continuo en la vida morontial
Crecimiento más allá de la vida material
Tras la muerte física, el alma continúa su evolución espiritual en la vida morontial, donde la fusión con el Ajustador se traduce en un avance significativo.
En este estado, el alma ya no está limitada por las condiciones materiales y puede explorar nuevos niveles de crecimiento y entendimiento.
Interacción con otros seres espirituales
En la vida morontial, el alma en crecimiento interactúa con otros seres espirituales, lo que permite el intercambio de experiencias y aprendizajes.
El Ajustador actúa como un guía en este proceso, facilitando la integración de nuevas enseñanzas y promoviendo un desarrollo más profundo de la espiritualidad.
4. El papel de la experiencia humana
Valor de las experiencias en la tierra
Cada experiencia vivida en la tierra es valiosa para el desarrollo del alma.
Las pruebas, las alegrías, las tristezas y los logros contribuyen a la formación del carácter del mortal.
El Ajustador utiliza estas experiencias para guiar al alma hacia un mayor crecimiento, ayudándole a entender cómo aplicar las lecciones aprendidas en su vida espiritual.
Potencial ilimitado
A medida que el mortal evoluciona, se hace evidente que el alma tiene un potencial ilimitado.
Con la guía del Ajustador, el ser humano puede avanzar hacia la perfección espiritual, llevando consigo las lecciones y la sabiduría adquirida en su camino.
5. La sinergia entre el Ajustador y el alma: Un viaje conjunto
La relación entre el Ajustador y el alma en crecimiento es una sinergia que enriquece ambos.
El Ajustador busca realizarse a través del alma, mientras que el alma, a su vez, se ve impulsada a crecer y expandirse a medida que se alinea con la guía divina.
Este viaje conjunto es una manifestación de la divina interconexión entre lo humano y lo divino.
Conclusión sobre el Ajustador y el alma en crecimiento
El Ajustador del Pensamiento es un guía vital en el desarrollo del alma humana.
A través de sus impulsos y dirección, ayuda a moldear el carácter del individuo y a facilitar su crecimiento espiritual.
La fusión con el Ajustador representa un logro trascendental, que permite al alma avanzar en su viaje hacia la perfección y la comprensión del universo.
En última instancia, el destino del alma es un viaje de colaboración entre el ser humano y la divinidad, un proceso de crecimiento que refleja el amor incondicional y la dedicación del Padre Universal.
El futuro del Ajustador del Pensamiento después de la fusión
La fusión del Ajustador del Pensamiento con el alma del ser humano es un evento trascendental en la evolución espiritual.
Una vez que esta fusión ocurre, se abren nuevas dimensiones de existencia y función para el Ajustador, que ya no es un fragmento separado de lo divino, sino que se ha convertido en una parte integral de un ser espiritual en crecimiento.
La fusión del Ajustador con el alma humana generalmente ocurre al acceder a la vida morontial, una vez que el mortal ha completado su etapa en la vida material y conseguido una ascensión que, indefectiblemente, ya no puede más que seguir endiosándose.
Veamos las implicaciones y el futuro del Ajustador después de la fusión a la luz de El Libro de Urantia:
1. Unión de identidades
Identidad compartida
La fusión implica una unión completa de identidades. El Ajustador y el ser humano fusionado operan como una sola entidad, combinando la sabiduría del Ajustador con las experiencias acumuladas del mortal.
Por tanto, esta nueva identidad no solo refleja el crecimiento del ser humano, sino también la esencia divina que el Ajustador representa. Intuyo algo grande, muy grande, en ese hecho.
Acceso a la sabiduría acumulada
Tras la fusión, el nuevo ser espiritual tiene acceso a una profunda reserva de conocimiento y comprensión.
Esto se traduce en una mayor capacidad para enfrentar desafíos y entender las verdades espirituales en niveles más profundos allá en la carrera morontial ascendente.
2. Continuidad del crecimiento espiritual
Desarrollo perpetuo
Aunque la fusión es un gran logro, no representa el final del crecimiento espiritual.
El ser fusionado continúa su viaje hacia la perfección, donde las experiencias en la vida morontial y en los niveles espirituales superiores permiten un desarrollo constante.
La fusión permite una mayor conexión con el universo y la divinidad.
Aprendizaje en la vida morontial
En la vida morontial, el ser fusionado tiene la oportunidad de seguir aprendiendo y creciendo.
El Ajustador, ahora parte del ser humano, experimenta la realidad de la existencia espiritual y se involucra activamente en el aprendizaje, lo que enriquece aún más su propia sabiduría.
3. Misión continua
Nuevo rol
Aunque el Ajustador ha fusionado su esencia con el mortal, su misión de elevar el alma no termina.
El ser fusionado puede ahora ayudar a otros en su camino espiritual, convirtiéndose en un agente de transformación y guía para aquellos que aún están en su viaje hacia la fusión.
Esto resalta la naturaleza de servicio que es inherente a la misión del Ajustador.
Participación en el propósito universal
Los seres espirituales fusionados se convierten en miembros activos del universo, participando en los planes y propósitos divinos.
Con su nuevo entendimiento y experiencia, pueden contribuir al bienestar de otros y a la evolución de la creación en su conjunto.
4. Unión con el Padre Universal: reflejo del amor divino
Relación más cercana con lo divino
Como venimos viendo, tras la fusión, el Ajustador se convierte en parte del ser humano, lo que les acerca a la divinidad.
Esta relación más íntima permite una comprensión más profunda de la naturaleza del Padre Universal y del propósito de la existencia, de manera que el ser fusionado se convierte en un reflejo del amor divino en el mundo.
A través de sus acciones y decisiones, pueden manifestar la esencia del Padre Universal, llevando su luz a otros y ayudando a elevar a aquellos que aún buscan la fusión.
5. Destino final
Ascenso a niveles superiores
Finalmente, después de la fusión, el ser humano puede avanzar hacia niveles de existencia más elevados, desde el plano morontial hasta los niveles espirituales del universo.
La experiencia adquirida en la vida terrenal y en la vida morontial, junto con la guía del Ajustador, prepara al ser para su papel en la vasta creación del universo.
Una nueva vida de servicio
El futuro del Ajustador y del ser fusionado es un continuo viaje de servicio y crecimiento.
El ser humano fusionado no solo busca su propia evolución, sino que también se dedica a la misión de ayudar a otros, guiando a nuevas almas en su propio camino hacia la fusión.
Conclusión sobre el futuro del Ajustador del Pensamiento después de la fusión
La fusión del Ajustador del Pensamiento con el alma humana representa un hito en el camino espiritual, marcando el comienzo de una nueva etapa de crecimiento y servicio.
La relación íntima entre el ser humano y el Ajustador, ahora unido, permite un aprendizaje continuo y una contribución activa al propósito divino.
El destino del Ajustador después de la fusión es expansión, interacción con lo divino y servicio hacia otros, todo ello en el contexto de la infinita evolución espiritual del universo.
Relación entre El Kybalion y el Ajustador del Pensamiento
Aunque El Libro de Urantia y El Kybalion provienen de fuentes muy distintas, existe un sustrato filosófico compartido en cuanto a la conexión entre lo humano y lo divino.
Hay algunos puntos interesantes donde podemos encontrar paralelismos entre El Kybalion y el Ajustador del Pensamiento del Libro de Urantia, especialmente si consideramos la perspectiva hermética sobre la naturaleza de lo divino y su manifestación en el hombre.
Ambos textos exploran la idea de que el ser humano tiene dentro de sí una chispa o fragmento de lo divino, que puede guiar su evolución espiritual hacia niveles más elevados de conciencia.
El Ajustador del Pensamiento puede verse, desde la óptica hermética, como la manifestación directa del Principio del Mentalismo y de los demás principios universales, que buscan que el alma humana alcance su máximo potencial espiritual.
Veámoslo:
1. El Principio del Mentalismo: «El Todo es Mente; el Universo es mental.»
Este principio enseña que la realidad última es mental, y que todo lo que existe es una manifestación de la Mente Universal o «El Todo».
En este contexto, podríamos interpretar el Ajustador del Pensamiento como una manifestación directa de esta Mente Universal en cada individuo, un fragmento puro de la divinidad que reside en la conciencia humana.
Así, el Ajustador actuaría como el vínculo entre la mente humana y la Mente Divina, guiando el pensamiento hacia un alineamiento con los principios cósmicos y espirituales.
2. El Principio de Correspondencia: «Como arriba, es abajo; como abajo, es arriba.»
En este principio, vemos un reflejo claro de la relación entre lo divino (Padre Universal) y lo humano (el alma).
El Ajustador del Pensamiento podría considerarse como la aplicación directa de esta ley, siendo un reflejo de la esencia divina en el nivel individual.
El fragmento del Padre en cada ser humano es un ejemplo de cómo lo divino (arriba) se manifiesta en lo humano (abajo) para que el alma crezca y se eleve hasta llegar a fusionarse con el Ajustador.
3. El Principio de Causa y Efecto: «Toda causa tiene su efecto; todo efecto tiene su causa.»
El proceso de crecimiento espiritual guiado por el Ajustador del Pensamiento también puede verse a través de este principio.
El Ajustador influye en las decisiones morales y espirituales de la persona, pero es la libre elección del individuo (causa) lo que determina su crecimiento y la dirección de su vida (efecto).
La armonía con el Ajustador resulta en una evolución espiritual progresiva, mientras que la resistencia o el mal uso del libre albedrío lleva a retrasos en este proceso.
4. El Principio de Vibración: «Nada está inmóvil; todo se mueve; todo vibra.»
Este principio habla del movimiento constante en todos los niveles del ser.
De manera similar, el Ajustador del Pensamiento trabaja en una constante «vibración espiritual» en el alma del ser humano, impulsando su progreso y evolución.
El alma, al ser receptiva al Ajustador, eleva su propia «frecuencia vibratoria», progresando hacia estados más altos de conciencia espiritual y, eventualmente, hacia la fusión.
5. El Principio de Generación: «La generación existe por doquier; todo tiene sus principios masculino y femenino.»
En el contexto de El Kybalion, la generación no solo se refiere a la procreación física, sino también a la creación de nuevas realidades y energías.
En este sentido, la relación entre el Ajustador del Pensamiento y el alma humana podría considerarse un acto de generación espiritual: la creación de una nueva identidad divina a través de la fusión.
Esta nueva entidad, que combina lo humano y lo divino, es un resultado de la «generación espiritual» facilitada por la guía del Ajustador.
Aspectos masculinos y femeninos en la relación Ajustador-Alma
Ajustador del Pensamiento (Aspecto Masculino):
Energía activa, creativa y directiva: En la tradición hermética, el aspecto masculino se asocia con la acción, la iniciativa y la dirección.
El Ajustador del Pensamiento puede considerarse como la fuerza activa que guía y estimula el desarrollo espiritual del ser humano.
Al igual que el principio masculino en El Kybalion, el Ajustador del Pensamiento tiene un papel «creador», infundiendo en el alma las ideas divinas, las intuiciones morales y la inspiración para que el individuo crezca espiritualmente.
El Alma (Aspecto Femenino):
Energía receptiva y formativa: En contraste, el principio femenino en El Kybalion se asocia con lo receptivo, lo que nutre, forma y da vida a las ideas o impulsos que provienen del aspecto masculino.
El alma humana desempeña este rol, ya que es receptora de la influencia del Ajustador.
Es en el alma donde los ideales y los pensamientos divinos son recibidos, asimilados y procesados, y a través de su colaboración activa, se produce el crecimiento espiritual.
La Generación Espiritual entre el Ajustador y el Alma
Podemos ver esta relación entre Ajustador y alma como un proceso continuo de generación espiritual:
El Ajustador, con su naturaleza divina y activa, implanta los ideales divinos (principio masculino).
El alma, como la parte receptiva del ser humano, acepta, procesa y nutre esas influencias, convirtiéndolas en crecimiento espiritual (principio femenino).
De esta interacción nace un nuevo ser espiritual, una nueva identidad en constante evolución, que eventualmente culmina en la fusión entre el Ajustador y el alma.
Otras consideraciones acerca del Ajustador del Pensamiento
Aunque hemos visto las características principales del Ajustador del Pensamiento, vamos ahora a hacer hincapié en unos puntos que me parecen interesantes para clarificar o ampliar algunos conceptos.
1. ¿Es el Ajustador del Pensamiento lo mismo que la conciencia?
A menudo, los seres humanos asociamos la conciencia con esa voz interna que nos ayuda a discernir entre lo que está bien y lo que está mal.
Nos alerta cuando estamos a punto de hacer algo incorrecto y nos impulsa hacia acciones más justas o éticas.
En este sentido, la conciencia moral es una herramienta valiosa en nuestro día a día, una brújula interna que todos poseemos.
Sin embargo, el Ajustador del Pensamiento va más allá de esta función de conciencia moral.
Aunque puede influir en la formación de nuestra conciencia, su misión es mucho más elevada y trascendental.
El Ajustador no solo nos guía en cuestiones éticas inmediatas, sino que tiene como objetivo ayudarnos a reconocer nuestra naturaleza divina y a alcanzar nuestro máximo potencial espiritual.
Mientras que la conciencia nos ayuda en decisiones cotidianas, el Ajustador trabaja en niveles más profundos, dirigiendo nuestra mente hacia la búsqueda de la verdad suprema, el bien absoluto y la belleza espiritual.
El Ajustador busca, en última instancia, que alcancemos la perfección espiritual y, eventualmente, la unión con Dios.
Es un guía que nos conduce a comprender nuestro lugar en el universo y nuestra relación con lo divino.
En resumen, el Ajustador del Pensamiento y la conciencia pueden parecer similares en ciertos aspectos, ya que ambos influyen en nuestras decisiones y nuestra moral.
Pero el Ajustador tiene un propósito más profundo: conducirnos hacia la perfección divina y ayudarnos a evolucionar espiritualmente más allá de las decisiones morales cotidianas.
2. Los Círculos Psíquicos y su relación con La Fusión con el Ajustador del Pensamiento
Los Círculos Psíquicos son indicadores del progreso espiritual de una persona en su viaje hacia la fusión con el Ajustador del Pensamiento.
Rara vez ocurre en la vida material, pero cuando lo hace, es el resultado de un avance extremadamente rápido a través de estos círculos.
El objetivo último de este proceso es la unión completa del alma humana con la chispa divina, un paso crucial en la evolución eterna del individuo.
¿Qué son los Círculos Psíquicos?
Los Círculos Psíquicos son siete niveles de crecimiento espiritual y psicológico que indican el progreso del ser humano hacia la madurez espiritual y la plena receptividad a la guía del Ajustador del Pensamiento.
A medida que un individuo avanza a través de estos círculos, se vuelve cada vez más consciente de la presencia del Ajustador y más alineado con su dirección divina.
Cada círculo representa un paso hacia la perfección mental, moral y espiritual. El avance en estos círculos se basa en la armonización de la mente con los valores universales, el uso ético del libre albedrío y la mayor receptividad a las influencias espirituales, como la del Ajustador.
¿La fusión con el Ajustador del Pensamiento en la vida material es posible?
Generalmente, como acabamos de ver, la fusión con el Ajustador del Pensamiento ocurre durante la larga etapa de la vida morontial, después de haber dejado atrás el cuerpo físico y el mundo material.
Sin embargo, se cree que cuando un individuo avanza rápidamente a través de los Círculos Psíquicos, especialmente a una edad relativamente joven, su alma podría estar lista para la fusión antes de la muerte física.
Estos son casos raros de gran armonización espiritual y madurez temprana en la vida humana.
Sin embargo, en raras ocasiones, El Libro de Urantia nos enseña que un mortal puede alcanzar un nivel tan alto de alineación espiritual, pureza de intención y armonía con la voluntad de Dios, que la fusión con el Ajustador puede ocurrir en la vida material.
Este fenómeno implica que el mortal ha logrado un desarrollo espiritual tan avanzado que ya no necesita pasar por el proceso normal de ascensión morontial para fusionarse con el Ajustador.
En este caso, el Ajustador se une de manera permanente con la personalidad del mortal mientras aún vive en su cuerpo físico.
Cuando ocurre esta fusión en la vida terrenal, suele ser un indicio de que el individuo está listo para avanzar hacia etapas superiores de existencia, aunque generalmente esto marca el final de su vida material.
Como curiosidad: Ejemplos de fusión en la vida material
El Libro de Urantia menciona algunos casos históricos en los que la fusión con el Ajustador ha ocurrido durante la vida terrenal.
Sin embargo, son tan raros que muchos de estos individuos suelen ser considerados excepcionales y espiritualmente avanzados.
Un ejemplo notable sería Enoc, quien, según el relato bíblico y urantiano, «caminó con Dios y luego fue llevado».
El Enoc al que me refiero es el hijo de Jared, que es el Enoc mencionado en el Antiguo Testamento, específicamente en el libro del Génesis.
Este Enoc es conocido por su vida justa y su relación cercana con Dios, y se le atribuye haber «caminado con Dios» (Génesis 5:24), lo que ha llevado a interpretaciones en las tradiciones judía y cristiana que lo consideran un ejemplo de un mortal que experimentó una unión especial con lo divino.
Por lo tanto, cuando hablamos del Enoc que se relaciona con la fusión con el Ajustador en El Libro de Urantia, nos referimos al hijo de Jared, el que tuvo una relación especial con Dios y es conocido por su vida justa y espiritual.
El Libro de Urantia sugiere que Enoc alcanzó una tan profunda armonía espiritual que fue fusionado con su Ajustador y trasladado directamente a los mundos morontiales sin experimentar la muerte física.
Otro caso es el de Elías, también registrado en la tradición bíblica, quien fue «arrebatado al cielo en un carro de fuego».
Este relato también se interpreta en El Libro de Urantia como un ejemplo de fusión con el Ajustador en la vida material, lo que le permitió a Elías evitar la experiencia de la muerte física.
Este fenómeno es sumamente raro y suele suceder solo en aquellos que han alcanzado un grado extremadamente elevado de progreso espiritual.
Los casos mencionados en las escrituras muestran cómo algunos individuos excepcionales, al alinearse completamente con la voluntad divina, pueden evitar la muerte física y avanzar directamente en su carrera espiritual.
En este post he sintetizado los conceptos y funciones más importantes del Ajustador del Pensamiento, pero es bueno que leas todo lo que el Libro de Urantia dice al respecto, con todas las particularidades y hasta curiosidades.
Si lo deseas, utiliza estos vínculos para ello:
- Documento 107: El Origen y la Naturaleza de los Ajustadores del Pensamiento
- Documento 108: La Misión y el Ministerio de los Ajustadores del Pensamiento
- Documento 109: La Relación de los Ajustadores con las Criaturas del Universo
- Documento 110: La Relación de los Ajustadores con los Seres Mortales
- Documento 111: El Ajustador y el Alma
Permíteme ahora una reflexión final..
Dicho lo dicho, visto lo visto, aprendido lo compartido… Al llegar a este punto, es inevitable contemplar la sublime importancia de detectar, aceptar e integrar la presencia del Ajustador del Pensamiento en la vida diaria.
Este fragmento divino que mora en la mente de cada uno de nosotros no es solo una guía espiritual, sino una manifestación directa del Padre Universal, una chispa del infinito esperando ser reconocida y seguida.
El verdadero propósito de vida no reside únicamente en los logros materiales o en la acumulación de experiencias terrenales, sino en este proceso más elevado: descubrir nuestra conexión con el Ajustador, aceptar su influencia y, en última instancia, integrar su presencia divina.
Este acto de integración es la puerta hacia lo eterno, el camino que nos conduce, paso a paso, al Padre Universal, el único destino auténtico y definitivo de nuestra existencia.
Aceptar al Ajustador no es un simple acto de fe, sino una experiencia activa de crecimiento espiritual. Es un compromiso con la verdad, la belleza y la bondad.
Es la única manera de llegar a Dios y de vivir una vida plena, iluminada por los más altos ideales del espíritu.
Al final, este reconocimiento y colaboración consciente con el Ajustador del Pensamiento es el mayor propósito que podemos abrazar y el regalo más valioso que podemos recibir.
Ahora Comparte tu Opinión, Comparte tu Conocimiento
COMENTA